Se nos habían fundido las dos bombillas del pasillo.
Le dije a mi madre que no se subiera a la silla para cambiarlas porque, si se caía, entonces iba a reinar el caos absoluto en nuestras vidas.
Me subí yo. Cojo la bombilla, previo aviso de que cortara la luz que un día casi me electrocuto (y no es broma), y digo: "Parece que no está fundida".
Cuando se la voy a dar a mi madre, se me resbala, cae al suelo y se rompe. "¡Cómo no!", me dice mi madre... "Ya sabía que algo de esto iba a pasar"... (Risas, cepillo y badil).
Un casquillo está estropeado y en el otro conseguí poner la bombilla. Estamos a media-luz pero el pasillo no queda nada romántico.
1. En fin, que he debido nacer para rica y que me lo den todo hecho. 2. Mi madre es fundamental... para todo.
Le dije a mi madre que no se subiera a la silla para cambiarlas porque, si se caía, entonces iba a reinar el caos absoluto en nuestras vidas.
Me subí yo. Cojo la bombilla, previo aviso de que cortara la luz que un día casi me electrocuto (y no es broma), y digo: "Parece que no está fundida".
Cuando se la voy a dar a mi madre, se me resbala, cae al suelo y se rompe. "¡Cómo no!", me dice mi madre... "Ya sabía que algo de esto iba a pasar"... (Risas, cepillo y badil).
Un casquillo está estropeado y en el otro conseguí poner la bombilla. Estamos a media-luz pero el pasillo no queda nada romántico.
1. En fin, que he debido nacer para rica y que me lo den todo hecho. 2. Mi madre es fundamental... para todo.
Ya has comprobado por ti misma que si las cosas pueden ir mal...irán.
ResponderEliminar(hablando de pensamientos en menos jajajaja).
jjajajajaja, bueno menos mal que no fue el jarrón de porcelana china ,jajajajaa.
ResponderEliminarBadil? no había oído nunca esa palabra.
ResponderEliminarRespuestas:
ResponderEliminarAlson: Era un pensamiento de mi madre... ¡no mío! Ja, ja, ja...
Alasdemariposa: De eso no tenemos... ;-)
MH: Era una pala para remover las brasas de la lumbre. En mi casa se usa "de toda la vida" para referirse al recogedor.
jajajajaja, vale.
ResponderEliminarSí, no hay nada como el "fundamentalismo" materno
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