Ana y yo iremos juntas a una boda aquí, el sábado.
Se casa la hija mayor de su jefe. Boda peculiar: una pareja les en una boda de católicos, apostólicos y romanos.
Algunas personas sí evolucionan. (Y cantaré en la misa... otra historieta para contar)
Fue bonito darles el regalo de bodas y sentir la emoción de la novia... Hay personas que saben apreciar los detalles y eso... ¡da un subidón al alma!
Intentaremos pasar con discreción, pero es cierto que Ana ha calado hondo en la familia (es presentada a tooooooodo el mundo) y creo que tendremos que pasar la tarde saludando...
En otro orden de cosas...
Anoche cenamos en nuestra casa con un batiburrillo de personas... unidas por una copa de vino a la hora del vermú... Ana y sus "impulsos".
La cena fue bonita, emotiva, cálida... A veces, solo hay que "querer" para que los momentos bonitos se den.
Todos estos momentos son un regalo de la vida, de disfrutar, de confiar en nuevos círculos. ¡Gracias a la vida!
Ana, gracias, por hacer de nuestra casa un hogar para compartir buenos momentos.