sábado, 28 de febrero de 2015

Llamadas

Anoche me llamó mi amiga S. Llevábamos mucho tiempo sin hablar.

"Tenía que hablar contigo urgentemente..." Me asustó. "...¿Te acuerdas del libro que me regalaste?..." Nada grave. :)


Está haciendo un curso. Tenían que llevar un libro especial. Eligió éste, porque yo se lo regalé en un momento muy difícil para ella. Dio el paso de irse con su pareja, con mil dudas, dejándonos "atrás"... Ha sido un libro tan diferente que ha sido seleccionada para hacer un trabajo especial con él. Me río yo sola.

Ahora está "centrada". ¡Qué palabra/expresión/sentimiento tan ridículo! ¿Verdad?

Me hizo ilusión que me llamara para contarme esto. Aunque no nos vemos con frecuencia, aunque pasan meses sin llamarnos, seguimos teniendo un vínculo especial.

Aprovechó para decirme: ¿Dónde vamos de viaje este verano? Ahora tengo que decidir si me voy de vacaciones con las chicas o hago el grado para el próximo curso. Y la verdad... el viaje me llama. Entre un topless perfecto y trabajar, el topless gana por goleada. Tengo que reflexionar.


viernes, 27 de febrero de 2015

Que se acabe

¡Que se acabe Febrero!

Mes de gotera para la vecina, de estar sin Internet, de perder mucha energía con las compañías de teléfonos, de subir tres veces al octavo por las escaleras porque no había ascensor, de llamadas y más llamadas al seguro, de discusiones con el del seguro porque te dan cita para una gotera para una semana después, de un teléfono fijo que no está disponible, que llama a quien quiere y no a quien tú quieres (cosas del número virtual), de programaciones y más programaciones...

Estoy cansada.

He ido a mi primera revisión del aparato de ortodoncia. He avanzado mucho, ya casi me "saltan" los dientes. El dentista dice que voy bien, que coma cosas blanditas. Yo solo pienso en un bocadillo de mi comida favorita.

En dos horas acabo la última programación obligatoria. Como ya nos han mandado las siguientes, me he propuesto un plan espartano para acabarlas en Marzo y ponerme a estudiar inglés como una loca en Abril y Mayo. Tengo esclavitud mental.

Mañana canto en unas jornadas gastronómicas-poético-musicales. Van mis padres y Ana a escucharme. Estoy nerviosa. Mis amigas me meten en el "fregao" y me toca ensayar y ensayar. Ahora no me apetece nada ir. Supongo que, mañana, al acabar, me compensarán los abrazos y los aplausos.

miércoles, 25 de febrero de 2015

De lo bueno, lo mejor

Tengo conexión a Internet.
Ana vino ayer. Ha ido a una reunión. Está volviendo y se queda a dormir.
Solo pienso en estar con ella en el sofá.
En una media hora vamos a disfrutarnos.
¡Sííííí!

domingo, 15 de febrero de 2015

Conectando

Ayer, después de 21 largos días sin vernos, volvimos a estar juntas. 

Pasamos media tarde en el sofá. Me gusta cuando se tumba encima de mí, le acaricio el pelo y me habla del pasado, del presente y, sobretodo, del mañana. 

Hoy me dice que le encanta estar así conmigo. Y a mí...

sábado, 7 de febrero de 2015

Águila roja desde casa padres

Sigo sin conexión a Internet. Me siento, otra vez, estafada con las compañías de teléfonos.

Compañía azul me aseguró que no había cobertura en mi nuevo hogar. Entonces tuve que pasarme a compañía roja, que me dijo que el lunes 2 tendría conexión SEGURO, SEGURO.

Di de baja el fijo en la compañía azul. Tuve que hacer portabilidad del móvil a la roja. Después, darme de alta en la roja con el fijo y el pack y bla, bla, bla...

Viene el técnico a mi casa. Me dice que sí hay cobertura con compañía azul. que por qué me he cambiado, que mis vecinos también son de la compañía azul... Llamo para reclamar, porque me cobran gastos porque no había terminado el contrato del móvil, y me dicen que habrá sido un error del operador. Pero como la portabilidad ha sido voluntaria, porque cobertura móvil sí hay... que no me indemizan... ¡Jódete!

Llamo a la compañía roja reclamando que llevo sin Internet una semana y me habían asegurado que tendría conexión el lunes... y me dicen que el operador me informó mal. Que no pueden saber quién es y como la portabilidad ha sido voluntaria... ¡Que te jodan otra vez!

Esto con veinte llamadas a cada compañía... y mucha mala leche por medio. Menos mal que en casa padres me acogen para poder trabajar... y actualizar.