Finales felices

Sin orden ni concierto...

- Hemos devuelto a todos "sanos y salvos" y felices.
- Nosotras también hemos vuelto sanas, salvas, felices, un poquito más morenas...
- Jefa, pasar 24 horas contigo es un regalo para el alma (y para la vista ;-) ).
- Anoche me volvió a entrar la melancolía al leer "se me encoge el estómago y el corazón al pensar que será nuestro último viaje". Yo espero que no. Y no me digas estas cosas que se me saltan las lágrimas.
- Es bonito volver a saludar a los camareros y que te reconozcan y te echen una sonrisa.
- El dolor de cabeza y las contracturas me jugaron un día terrible el miércoles. El jueves me desquité y me monté en todas las atracciones.
- Es estupendo irte a una excursión "cabreada" con la mitad de tus alumnos/as y volver "encantada" constatando que se han portado fenomenal, que han disfrutado a tope y que tienen una actitud positiva hacia todo (menos a estudiar en mi clase...).

- Hay compañeras (las del otro cole) que no sé para qué han venido a esta excursión... Yo tengo claro que el objetivo principal es que mis chicos/as DISFRUTEN. Si no, no habría ido. Correr por los pasillos es algo natural. Decirles que no corran, obligatorio. Echar una bronca como si hubieran matado a alguien, innecesario.

- Sigo opinando que esta excursión deberíamos hacerla un curso antes. En el último, "comerían de nuestra mano".

- Hay muchas razones por las que ha merecido la pena ir a este viaje. Entre las mejores: ver sus ojos chispeantes y sus sonrisas cada día, sentir la ilusión contenida al montar en el bus, oír miles de veces "María, ¿nos quedamos aquí para siempre? Llama a mis padres y díselo"...

- ¡Ayyyy! Estoy contenta. Sí.