martes, 24 de mayo de 2011

Esos locos que enseñan

L. me ha mandado un correo titulado: "Esos locos que enseñan".

Esos locos que enseñan. Yo los conozco. Los he visto muchas veces. Son raros. Algunos salen temprano por la mañana y están en el cole una hora antes, otros recorren todos los días más de 100 Km. de ida y otros tantos de vuelta. Están locos.

En verano les dan vacaciones, pero no desconectan del todo, piensan en sus clases, preparan tareas para el curso siguiente. En invierno hablan mucho, siempre llevan caramelos de miel y limón en los bolsillos, otros con una botella de agua a su lado. Su garganta siempre está dolorida, pero siguen enseñando, a veces fuerzan su voz, pero siguen transmitiendo sus conocimientos con cariño e ilusión.

Yo los he visto, no están bien de la cabeza. Salen de excursión con sus alumnos y se encargan de gestionar autorizaciones, recogida de dinero y responsabilidad extra.

Qué será de ellos y ellas. Por la noche sueñan con el colegio, se les aparecen planetas, ecosistemas y personajes históricos. He escuchado que llegan cargados con cuadernillos y exámenes, que han corregido la tarde anterior en su casa.

Son mujeres y hombres, casados, solteros,...de diferentes edades, pero a todos les apasiona su trabajo, ver crecer a sus alumnos, ayudarlos y conseguir de ellos ciudadanos competentes.

Los he visto muchas veces. Están mal de la cabeza. Algunos dicen de ellos que viven muy bien, pero les han recortado el sueldo y siguen trabajando incluso más que antes, algunos no miran ni su nómina porque su pasión por la enseñanza los hace ciegos a pensar en el cobro. Disfrutan con lo que hacen, aunque haya padres que los discutan y les quiten autoridad, ellos siguen hacía adelante.

Están mal; por las tardes quedan para hacer cursos de formación y no les importa perder tiempo de su ocio para reciclarse.

Dicen que son autocríticos y que hacen balance de sus experiencias educativas, que se frustran cuando no salen las cosas como esperaban, que se alegran cuando sus alumnos avanzan.

Están mal de la cabeza, yo los he visto. Dicen de algunos que fueron muy importantes, que siempre tienen palabras de aliento; dicen sólo que son MAESTROS y que se sienten MUY ORGULLOSOS DE SERLO.

Hemos ido de excursión con 53 niñas y niños. 7 de ellos de Educación Especial. Como no cabíamos todos en un autobus, para que no nos cobraran 400 euros por otro, hemos ido cuatro maestros en MI coche.

Hemos salido a las 9 de la mañana y hemos vuelto a las 7 de la tarde.

Pero se han portado fenomenal y nos lo hemos pasado MUY BIEN.

Días como hoy compensan.

4 comentarios:

  1. Olé. Lástima que solo lo entendamos los que estamos majaras...

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  2. En mi guarde fuimos ¡el sábado! desde las 8'45 de la mañana hasta las 21'15 de excursión: niños, niñas, familias y maestras... en total unas 240 personas... ¡¡y nos lo pasamos tod@s fenomenal!!

    P.D. Sí, lo sé... yo también estoy loca :d

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  3. Respuestas:

    Hormiga: Y las familias de los majaras y algunas amigas. ;-)

    Helen: A días, a días...

    Jam: ¡Bien!

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