viernes, 26 de febrero de 2010

Compañeras

Una de mis compañeras lleva todo el curso "encasquetándome" a cinco niños que no dan religión. Repiten la misma clase pero ella opina... "que la música les va bien".

Hoy me ha dicho que el martes tengo que acompañarlos a ver a los bomberos. Ok. Luego me he enterado que ella se incorporará a las 11 horas y otra compañera también... ¡y me piden que vaya yo porque necesitan manos para hacer el recorrido! ¡Pero no pierden sus horas libres!

Cambio de clase. Voy a 3º y me dice la tutora que si pueden quedarse diez minutos más a acabar un examen y luego van bajando (cuando vayan acabando a mi clase)... He dicho que no. ¿No es evidente que pierden 10, 15, 35 minutos de una clase a la que sólo van una hora semanal? ¿Por qué me pides eso?

He explotado.

He ido al despacho de la Directora, le he dicho TODO lo que me parece mal, he exigido que me respeten... y me ha entrado una tembladera mortal.

En el recreo he hablado con las de la excursión. Tan seria, que se han preocupado. Nunca me han visto así. Ahora la excursión se hace a las 11 horas... ¡sin problemas!. Que no se habían dado cuenta, que no tengo que ir, que no pasa nada... ¡Seréis jetas e inútiles! Pedir ayuda y escaquearos vosotras mismas...

No me enfado, estoy triste. 

9 comentarios:

  1. ea ea ea ya paso todo! :o)

    Un besito

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  2. Dí que sí, que no te tomen por el pito del sereno, coño ya!

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  3. Es que el mundo tiene mucha jeta... Has hecho muy bien en plantarte. Yo te aplaudo ^^

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  4. La de música siempre es el último mono. Veo que en otras ciudades/pueblos pasa igual. Paciencia y mala leche.

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  5. Has hecho bien en decir lo que pìensas, tienes toda la razón de mundo. Hay gente que no sabe mirar más allá de uno mismo y eso no e sjusto.

    Un abrazote!

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  6. Siempre hay que estar con la escopeta montada ehhhh.
    Tranquila, es un mal común.

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  7. Respuesta común:

    Gracias. A mí me cansa mucho estar luchando cada día por hacer las cosas con naturalidad y trabajando como hay que hacerlo. No entiendo cómo alguien no puede darse cuenta de que no cumple sus obligaciones.

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