domingo, 3 de febrero de 2013

El dilema

El dilema está en "vivir como quieres" o "vivir como puedes".

"Vivir como puedo" me desequilibra, me hace sentirme insegura, me repliega, me rebota, hace que no te desee, que no quiera ver a nadie...

Ya sé que la vida consiste en dar y recibir, en consensuar, comunicar... pero no se puede si s(ó)lo se avanza por una parte.

Y me canso. Porque parece que soy egoísta, pero creo que me paso más de media vida dando y no recibiendo. Y a mí no me compensa. No soy tan buena.

Tengo el día torcido, torcidísimo: porque estaba segura de que no nos veríamos y porque no aguanto a mi hermana. No hay feeling, parece que te estoy pidiendo yo el favor de ir al aeropuerto y... ¡no! Puedo ir con mi coche y punto. No necesito que me lleves. NO te necesito.

Ana: no te quiero presionar pero si tú no das un paso adelante, por mucho que te quiera, no seremos una pareja. Seremos dos vidas que a veces se unen y otras se quedan en un sms o un whatsapp. Y ése no es mi ideal de vida.

Yo me imagino contigo en la casita nueva, con colores cálidos, saliendo a tomar un vermut, comiendo en casa de mis padres o no, en la de los tuyos o no, con mis amigos o con las tuyas... o no... O no si elegimos quedarnos tranquilamente solas, tú y yo, yo y tú, comiendo, haciendo el amor, echándonos la siesta, viendo una peli, leyendo al lado de la chimenea, bailando descalzas, sonriendo, acariciando, tocando... sin tener que dar explicaciones de dónde o con quién estamos.

9 comentarios:

  1. María, que parecida somos, debe ser que somo tan rectangulares (hoy me dijo Ave que yo no era cuadricualada, que era rectangular)

    Empiezas fuerte, mucha suerte en el juego del amor.

    ResponderEliminar
  2. Uf! si que es un mal día. Espero que vaya a mejor.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Es de sabias hallar el equilibrio entre el quieres y el puedes.
    Ya te adelanto que no hay convivencia perfecta.
    Que se enderece el día, que tú puedes

    ResponderEliminar
  4. Pues si no te compensa ya sabes, a tomar medidas para cambiarlo.
    Es difícil, pero tienes que pensar en ti y en tu felicidad.

    ResponderEliminar
  5. María, un mal día lo tiene cualquiera. No te preocupes. La convivencia tiene sus más y sus menos. Según hacia donde se incline la balanza... ya sabes. Vivir en pareja supone un esfuerzo, pero si hay buena base se va haciendo día a día.
    Martina.

    ResponderEliminar
  6. Haz caso a Martina que anda construyendo...
    ;o)

    ResponderEliminar

  7. Yo diría que "vivo como quiero", pero seria una cochina mentira. Vivo como puedo. No es que me pueda quejar. Llevo con mi compi 13 años y la convivencia tiene sus dias malos y sus dias buenos. Ambas partes tienen mucho que ganar y mucho a renunciar. El quid del asunto sería, digo yo, encontrar un equilibrio entre lo que quiero y lo que puedo y decidir entonces qué es lo que quieres tu (yo, ella, él....)

    ResponderEliminar
  8. Tú pide, a lo mejor es que no pides...

    Un beso, María.

    ResponderEliminar
  9. Respuestas:

    Blau: ¿Cómo es posible ser rectangular por dentro y tan redonda por fuera?

    Chris: Todo pasa...

    Alson: El tan preciado equilibrio... ¡qué difícil es encontrarlo a veces!

    Ari: No está en mi mano, pero compensa.

    Martina: ¡Cuánto tiempo, qué alegría! Aún no convivimos.

    Isa: Un galimatías eso de yo quiero, tú quieres, yo puedo, tú puedes... ¿no?

    Candela: Llevas toda la razón.

    ResponderEliminar

Tu versión