domingo, 5 de mayo de 2013

La marabunta

El fin de semana pasado nos quedamos a tomar algo en una terraza. Tengo un catarro de tres pares de narices.

Llevo toda la semana enfadada con los gilipollas del extintor. Parece que tienes que pedir perdón a algunos padres por reclamar que te limpien lo que sus hijos te han manchado. Perlas:

- Madre del gilipollas 1: No tenías que haber dicho nada a mi hijo en el colegio. Siempre echan la culpa al mío. Parece que le tenéis manía.

- Padre del gilipollas 2: Es que os queréis aprovechar ahora de nosotros. No será para tanto si solo os habéis quejado dos personas. (Hablando de las chicas de la empresa de limpieza). ¿Ésas que han estudiado para tener una empresa "especializada"?

Por otra parte, otras dos madres me pidieron disculpas quince veces cuando llamé a sus casas y no pusieron pegas a que vinieran a limpiar la cochera.

Al día siguiente se presentaron 4 de los 5 chicos junto a otras 5 de las 6 chicas que están también implicadas,  en la clase en la que estaba haciendo apoyo. Vinieron a pedirme perdón y a decirme que estarán esta mañana, a las 12, en la puerta del garaje para limpiar todo.

Las chicas (11 y 13 años, también alumnas o exalumnas) estúpidas, riéndose, que ellas no habían sido, que qué exagerada soy... Me tuve que plantar y decirles que si se iban a reír de mí, que marcharan por donde habían venido.

Una de las implicadas es una alumna de 5º a la que le doy apoyo, que no estudia nada, que se acuesta a las 00.30 todos los días porque habla por teléfono de las 22 a las 24 horas con un "amigo de 13 años". (Hablando con la profe me dice que tiene varios amigos). Y luego me dicen que no hay que quitar la custodia de esa hija a su padre... cuando come en el comedor escolar, hace los deberes en la escuela hogar... y casi, casi, va a casa solo para dormir (y hablar por teléfono).

El viernes vino Ana. Se empeñó en salir a dar una vuelta y acabamos encontrándonos con una persona que no quería encontrarme ni a tiros. Me enfadé mucho porque llevaba dándole toques para que nos fuéramos de allí un buen rato. Me cabreé tanto que me metí en la cama sin hablarnos. Mientras, pensaba que era tonta, que cómo podía desaprovechar el tiempo si era la única noche en que íbamos a dormir juntas... pero algo en la mente no me dejaba volverme. Pero no me puedo dormir enfadada con ella... así que me di la vuelta para pedirle perdón y dormir abrazadas. ¡Menos mal!

Ayer fuimos de romería al pueblo de M. Comida campestre con solecito rico, rico... Lo pasamos bien. Ana me envió este mensaje: "Soy muy FELIZ a tu lado, con tus amigos, contigo a solas, dejándome querer a tus amigos. Gracias por estar en mi vida. Te quiero". Y me puse a llorar como una tonta. Yo también, TE QUIERO.

4 comentarios:

  1. Uf! es que no puedo con los adolescentes. Cómo admiro a las que os dedicais a aguantarles a diario... aunque tiendo a penasr que hay una vena masoca por ahí jeje.

    Hace tiempo me dieron un consejo... cuando duermas con tu pareja, nunca te acuestes enfadada. Procuro llevarlo a la práctica.

    Besos!

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  2. María, feliz inicio de semana. Disfruta de esos tequiero!

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  3. mis amigos que tienen mucha más experiencia que yo en esto del matrimonio, siempre me han dicho, que nada de dormir en el sofá, que la pareja se tiene que ir a la cama con los problemas resueltos, aunque sean las cinco de la mañana. Seguimos el ejemplo.

    Y en cuanto a lo de emocionarte, me parece normal. El amor a veces tiene expresiones que desbordan. Que te salten las lágrimas es una de ellas. Nosotras, últimamente, con esto de la boda estamos de un emotivo que no veas, se nos llenan los ojos enseguida.

    Una amiga mía me dijo que si encuentras al amor de tu vida, tocas el cielo. Es cierto. Disfrutadlo.

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  4. Respuestas:

    Chris: Se me agotan las ganas.

    Blau: Siempre. Igualmente.

    Martina: Lo arreglamos.

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