Port Aventura

Mañana emprendemos una nueva aventura "excursionil" con nuestros chicos y chicas "mayores". De momento, no me apetece nada pasar cinco días con sus 24 horas cuidando de 17 "moniatos/as", de los cuales: 1 hiperactivo, 1 diabética ingresada la semana pasada porque no acepta la insulina, 1 que se le acaba de salir la rótula, 1 con alergia a todo, 5 ó 6 cabroncetes... Pero tampoco quería ir a la comunión ayer y, al final, lo pasé bien.

Plan:

Lunes: 8 horas recogida. 8.45 me recogen a mí. Normas de comportamiento, conocer al otro grupo, a las otras maestras, hacerme la simpática... Sobre las 12 horas: parada en Zaragoza, almuerzo, visita del Pilar... Sobre las 19 horas: llegada al hotel, reparto de habitaciones, primeros jaleos... Sobre las 3:00 a.m. recojo todas las llaves de las habitaciones, les requiso los móviles, y ¡aquí no se mueve ni Dios! ¡Todos a dormir u os pasáis mañana todo el día a mi lado...!

Martes y miércoles: Día en Port Aventura. Primeras quemaduras por no darse crema solar. Ratitos en la piscina. Guerra de almohadas con la super-jefa, cuento y masaje. (Espero...).

Jueves: Costa Caribe por la mañana y playa por la tarde. Parece divertido, pero me paso el día dándoles crema del sol y vigilando en la playa no sea que se nos ahogue alguno. Y siendo miope... conlleva muuuucha energía gastada.

Viernes: Piscinita en el hotel. Jacuzzi con los chicos/as. Obligarles a salir del mismo antes de que se queden como pasas y hay que devolverlos esa misma noche. Hablar en inglés con los alemanes que rondan por allí... Sobre las 11 de la noche... llegada ¡por fin! a mi casa, a mi cama...

Lo cierto es, que a pesar de la responsabilidad, de estar todo el día de aquí para allá, de las quemaduras, dolores de cabeza por insolación, alguna bronca... creo que vendré relajada.